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La segunda temporada de Jujutsu Kaisen dejó a los fanáticos boquiabiertos al revelar los oscuros motivos detrás del sorprendente giro de Suguru Geto hacia la maldad. Mientras que la mayoría de los Hechiceros tienen una clara comprensión del camino que están siguiendo, Geto se encuentra altamente delirante y parece estar atrapado en la encrucijada entre el bien y el mal. Aunque nadie duda de sus poderes y su amor por sus queridos compañeros Hechiceros, parece tener serios problemas con aquellos que no lo son. De hecho, se reveló en el quinto episodio de la segunda temporada que Geto planeó el asesinato masivo de un pueblo entero, acabando con la vida de 112 personas inocentes. Este acto despiadado fue un golpe inesperado para todos, sobre todo para Satoru Gojo.
Gojo no quería creer que Geto fuera realmente el responsable de estos crímenes atroces, pero el uso de la Técnica de Manipulación de Maldiciones confirmó su implicación, y Geto mismo confesó a Nobara sobre sus acciones. Pero, ¿qué llevó a una persona confiable como Geto a llegar a tal extremo y qué intentaba conseguir con todo esto?
Había vivido una vida envidiable con sus compañeros Hechiceros y debería haberse sentido orgulloso de salvar a la humanidad de las malvadas Maldiciones, pero en cambio, eligió un camino oscuro, traicionando todo en lo que una vez creyó. Resulta que Suguru Geto nunca realmente disfrutó de la lucha; ninguno de los Hechiceros lo hacía, pero Geto culpó a los no Hechiceros por el surgimiento de las Maldiciones y consideró inútil luchar por ellos. Siempre menospreció a los no Hechiceros y los llamaba “monos”. Es cierto que los no Hechiceros fueron la razón por la que las Maldiciones nacieron en primer lugar. Como se explicó en el episodio, liberaron más Energía Maldita en comparación con los Hechiceros debido a su incapacidad para controlar esa energía. Arrastrado por este hecho, Suguru Geto deseó eliminar a todos los no Hechiceros del mundo y construir un mundo donde solo existieran los Hechiceros. Además, creía que ser un Hechicero era el siguiente paso en la evolución humana y que los humanos finalmente aprenderían a controlar su Energía Maldita por el temor a ser eliminados.
Sin embargo, este odio hacia los no Hechiceros no siempre estuvo presente en su mente. Los pensamientos de superioridad de Geto hacia los humanos normales se intensificaron después de un incidente trágico con Riko Amanai. Siempre había considerado a los Hechiceros como su verdadera familia y nunca quiso verlos sacrificados por los no Hechiceros. Sin embargo, la muerte de Riko Amanai fue un gran shock para Geto, y culpó a los no chamanes por su desaparición. Con esto, sus creencias se reforzaron, y tomó el primer paso para crear su mundo ideal al matar a 112 personas sin mostrar ningún remordimiento.
Durante el rescate de Riko Amanai de la Asociación de Vasijas del Tiempo, Geto fue testigo de la crueldad de los no Hechiceros que aplaudieron y celebraron su muerte. En ese momento, Geto evitó matarlos, ya que aún creía que debía haber una razón para matar. Sin embargo, en el episodio 5 de la segunda temporada, se unió a la misma organización como su líder y se vengó de la muerte de Riko matando a sus miembros y liberando a las dos chicas Hechiceras de su cautiverio.
La transformación de Suguru Geto de un Hechicero leal y respetable a un villano cruel y despiadado ha dejado a los fans cuestionándose cómo pudo haber llegado tan lejos en su oscuro camino y qué depara el futuro para este personaje. Con esta revelación impactante, la segunda temporada de Jujutsu Kaisen ha alcanzado nuevas cotas de emoción y suspenso, dejando a los espectadores ansiosos por descubrir cómo se desarrollará esta impactante historia.
Fuente: Twitter, Manga y Anime.