Como saben el incremento en el consumo de anime ha experimentado un crecimiento global exponencial. Esto ha convertido al mercado internacional en un área de gran interés para las productoras y distribuidoras japonesas. Parte de este impulso se debe a las facilidades y comodidades que ofrecen plataformas de streaming. Estas permiten seguir en emisión en simultáneo con Japón las series más recientes. Empresas como Crunchyroll, Netflix y Amazon Prime Video tienen un papel importante. Sin embargo, el fenómeno del anime pirata también ha cobrado relevancia.
Sin embargo, la otra cara de este auge es una preocupante proliferación de sitios pirata. Estos continúan distribuyendo series sin licencias y generan millones de dólares en ingresos por medio de la venta de espacios para publicidad. Frente a esta problemática, la industria japonesa ha decidido redoblar esfuerzos. Están llevando a los responsables de las pérdidas estratosféricas ante las autoridades. Los resultados ya empiezan a hacerse notar.
Según un informe recientemente publicado por la Content Overseas Distribution Association (CODA), los avisos de eliminación por violación de derechos de autor (conocidos como takedown notices o notificaciones DMCA) dirigidos a sitios de streaming ilegales para ver anime pirata han aumentado considerablemente durante 2024. La presión contra la piratería se intensifica a escala global. Hay datos que revelan tanto avances significativos como alarmantes resistencias por parte de algunos portales conocidos. Especialmente Gogoanime y 9anime.
Uno de los puntos más destacados del informe es el alto índice de cumplimiento. Las plataformas de redes sociales y servicios de video como Facebook, YouTube, TikTok, Google y Vimeo son destacadas. Estas compañías han respondido con tasas de eliminación superiores al 94% tras recibir miles de solicitudes de eliminación por parte de los titulares de derechos. Facebook, por ejemplo, eliminó casi el 94% de los contenidos señalados. Esto fue tras recibir más de 176,000 solicitudes en 2024. TikTok y Google incluso superaron el 99% de cumplimiento.
Este compromiso demuestra cómo las grandes corporaciones de tecnología han comenzado a asumir una mayor responsabilidad frente al problema de la piratería digital para frenar sitios web para ver anime pirata. Esto es en gran parte debido a la presión ejercida por asociaciones como CODA y las leyes internacionales de propiedad intelectual.
Sin embargo, en el otro extremo se encuentran las plataformas especializadas en streaming de anime sin licencia. Aquí, los esfuerzos legales parecen no tener impacto alguno. Entre las más señaladas se encuentran Gogoanime, 9anime, DramaCool, VoirAnime y AniTubeBiz. De acuerdo con el informe de CODA, Gogoanime ignoró casi 40,000 solicitudes de eliminación, mientras que 9anime dejó sin respuesta más de 11,000 notificaciones. Otros portales como DramaCool, VoirAnime, y AniTubeBiz acumularon más de 48,000 solicitudes ignoradas de manera colectiva.
A pesar de que algunos de estos sitios han dejado de operar bajo sus nombres originales, muchos continúan activos bajo nuevas direcciones URL. Esto dificulta la aplicación efectiva de las leyes de copyright. Este fenómeno de «cambio de piel» digital representa un obstáculo constante. Los operadores de sitios piratas simplemente migran sus contenidos a nuevos dominios tras ser detectados. Las organizaciones que buscan frenar la piratería enfrentan este desafío.
Además, muchos de estos sitios están alojados en países con legislaciones laxas o poco colaborativas en materia de propiedad intelectual. Esto complica aún más su cierre definitivo. Aunque ya están en la mira de las compañías para aprovechar cualquier descuido para iniciar medidas legales. Las empresas esperan actuar en los países donde residan los miembros propietarios de cada sitio web ilegal.
Uno de los ejemplos más paradigmáticos sobre cómo una plataforma puede evolucionar de la piratería hacia la legitimidad es Crunchyroll. Fundada en 2006 como un sitio que alojaba anime sin licencias, Crunchyroll logró un cambio radical en su modelo de negocio a partir de 2009. Fue entonces cuando comenzó a firmar acuerdos oficiales con distribuidoras japonesas.
El exeditor de Dragon Ball y ex-CEO de Shueisha, Kazuhiko Torishima, reveló recientemente que uno de los primeros pasos para combatir la piratería fue, precisamente, convertir a Crunchyroll en un aliado. “Había un sitio pirata llamado Crunchyroll, y llegamos a un acuerdo para que pudieran transmitir Naruto”, declaró. Este movimiento estratégico fue clave para legitimar a la plataforma. Actualmente, Crunchyroll ostenta los derechos de distribución de más de 2,000 títulos de anime.
Hoy en día, Crunchyroll no solo se ha convertido en el principal referente del anime legal fuera de Japón. También ha demostrado que es posible redirigir la piratería hacia modelos sostenibles. Estos modelos benefician tanto a creadores como a consumidores.
En paralelo al crecimiento de las solicitudes de eliminación en plataformas de anime, otro informe reveló un dato importante. Estados Unidos es el país número uno en consumo de manga pirateado en línea. Esta estadística resalta una paradoja importante. Mientras que el mercado estadounidense es uno de los más lucrativos para la industria del manga y el anime, también es uno de los más activos en términos de infracciones de derechos de autor.
Este fenómeno puede explicarse en parte por los retrasos en la localización oficial de contenido, los precios de acceso, o la falta de disponibilidad simultánea con Japón. No obstante, iniciativas como la expansión de servicios de lectura digital legal están empezando a reducir esa brecha. Ejemplos de estos servicios son Manga Plus de Shueisha o la app de VIZ Media.
A pesar de los avances logrados en plataformas sociales y el ejemplo transformador de Crunchyroll, el camino hacia una erradicación significativa de la piratería en el anime es todavía largo. La cultura de consumo inmediato sigue siendo un desafío. La falta de educación sobre propiedad intelectual y la accesibilidad que ofrecen los sitios pirata siguen siendo atractivos para muchos usuarios. Esto es especialmente cierto en regiones donde el acceso legal es limitado o costoso.
El informe de CODA es un llamado de atención tanto para las autoridades como para los consumidores. La eliminación efectiva del contenido pirata requiere colaboración internacional y reformas legales. También es esencial la inversión tecnológica en detección de contenido no autorizado. Además, se necesita un cambio cultural en los hábitos de consumo.
Fuente: Foros, redes Sociales y otras plataformas.