Se planea un cambio en las leyes y anticipando el resultado de la próxima revisión que hará el gobierno de Japón sobre la llamada “Nueva Ley de Contenido Pornográfico“, promulgada en junio de 2022, profesionales de la industria del cine para adultos en Japón, que incluyen a personal de producción y actrices, han iniciado una campaña de recolección de firmas y una manifestación pacífica en todo el país desde el pasado 9 de febrero.
En la manifestación y recolección de firmas del pasado 10 de febrero en Akihabara, Tokio, se observó la participación de las actrices del porno Riko Hoshino ( 星乃莉子), Sawa Sasaki (佐々木咲和), y Kotoko Sakurawa (桜和ことこ).
Por otra parte, directores y miembros de producción declararon: «Pronto, la industria del cine pornográfico en Japón va a desaparecer. Las personas que nos dedicamos a esta industria también tenemos una vida como todos los demás. Siempre fue un error que el Congreso haya aprobado una ley como esta»; «Me gustaría que esta nueva Ley pase por un proceso de revisión para que sea más considerada con los que trabajamos en esta industria»; y «Me opongo a cualquier discriminación simplemente por trabajar en esta industria. Yo realmente me preocupo por las actrices, las mayores afectadas por esta Ley. Por favor, apóyennos a que el Congreso finalmente nos escuche».
Riko Hoshino, una actriz del cine pornográfico, comentó: «Si las cosas continúan así, la industria del cine para adultos en Japón va a desaparecer y el ambiente de trabajo será completamente imposible de tolerar. Quiero que el Congreso escuche la opinión de aquellos que realmente estamos involucrados en esta industria. Siento que nuestros derechos humanos y el orgullo que sentimos por nuestro trabajo están siendo pisoteados por el Congreso».
A finales de enero, el congresista Satoshi Hamada (浜田聡) ofreció una audiencia a miembros de la industria del cine pornográfico en Japón, quienes informaron que el número de películas para adultos (conocidas como JAV) había disminuido considerablemente como resultado de la “Nueva Ley de Contenido Pornográfico”, por lo que muchas actrices habían perdido sus empleos. Esto no solo provoca que las actrices se retiren de un negocio que ya no es rentable, sino que busquen oportunidades en el cine pornográfico independiente, que no está regulado del todo por la Ley en cuestión y que opera en la clandestinidad.
Un director comentó al respecto: «Me gustaría que el Congreso se sentara a escuchar la opinión de las mujeres que realmente trabajan en esta industria. Esta Ley fue creada por personas que siente rechazo hacia la industria del cine para adultos y creen que las mujeres japonesas están siendo obligadas a participar en este tipo de producciones. En el Congreso piensan que una mujer no puede decidir por sí misma, y les están arrebatando oportunidades de trabajo nada más porque sí».
La Asociación para la Normalización de la Industria Pornográfica, que organizó la campaña de firmas, señaló que el problema principal es que, tras la firma del contrato, las actrices no pueden comenzar a grabar hasta un mes después. Sumado a esto, tras finalizar las grabaciones, la productora no puede lanzar la película al mercado hasta que pasen otros cuatro meses (retrasando los ingresos para actrices y miembros de producción). Esto obstaculiza diversas formas de trabajo y constituyen una regulación excesiva que viola la “libertad de elección de ocupación” y el “derecho a la libertad de comercio” según el artículo 22 de la Constitución de Japón.
Hitoshi Futamura, uno de los iniciadores de la asociación, declaró: «La Nueva Ley tiene aspectos positivos, pero también demasiados aspectos negativos. Sobre todo, el nombre es insultante. Legalmente se conoce como “Ley para la Prevención y el Alivio de Daños por Actuaciones en Cine Pornográfico”, lo que atenta contra las mujeres que participan en esta industria. En cuanto a los periodos de grabación y demás, creo que es algo bueno para las mujeres que participan en una grabación pornográfica por primera vez, pero me gustaría que no se afecte a las mujeres que llevan bastante tiempo en esta industria y que, evidentemente, trabajan en esto por su propia decisión».
Fuente: Livedoor News