Se a informado en las ultimas oras por varios medios un informe sobre un proyecto de ley en Texas que podría penalizar la posesión de anime, manga y videojuegos con personajes de apariencia infantil en situaciones explícitas. Este proyecto, impulsado por el Senado de Texas, fue aprobado por unanimidad y, de ser promulgado, sancionaría la tenencia de dicho contenido.
De acuerdo con el Proyecto de Ley Senatorial 20, destinado a combatir la creación y distribución de CSAM (P*I*), se amplía la definición de «material visual prohibido» para incluir dibujos animados, animaciones y contenido generado por inteligencia artificial. Es importante destacar que el proyecto aún debe ser aprobado por la Cámara de Representantes de Texas antes de convertirse en ley. En caso de ser promulgado, entraría en vigencia el 1 de septiembre de este año.
Además, la propuesta busca enmendar el Capítulo 43 del Código Penal de Texas, añadiendo la Sección 43.235, que tipificaría como delito poseer, acceder con intención de ver o distribuir material visual obsceno que represente a un personaje con apariencia de menor de 18 años en situaciones de índole se*ual.
Según el proyecto de ley, un delito tipificado en esta sección se considera un delito grave, castigado con pena de cárcel estatal. Además, las sanciones se endurecen en caso de reincidencia: una condena previa eleva la infracción a delito grave de tercer grado, mientras que dos o más condenas previas la incrementan a delito grave de segundo grado, con penas aún más severas.
No obstante, la posible aprobación de esta ley ha generado preocupación en la comunidad del anime, manga y videojuegos, ya que algunas franquicias populares podrían verse afectadas. Ejemplos de ello son Dragon Ball, donde Bulma protagonizó algunas escenas explícitas, Kill la Kill, con las transformaciones de Ryuko Matoi y otras escenas fanservice, Monogatari; y otras series con alto contenido ecchi, como No Game No Life.
La preocupación también radica en la interpretación del término «obsceno» por parte de los legisladores texanos, ya que el diseño de ciertos personajes ficticios podría hacer que una gran variedad de contenido caiga bajo esta regulación. Además, la legislación de Texas define el «material obsceno» como aquel que, en su conjunto, carece de valor literario, artístico, político o científico, significativo, lo que podría influir en la aplicación de la norma.
Como hemos mencionado con anterioridad, el Proyecto de Ley aún no se ha aprobado, por lo que debemos esperar como este caso avanza en las próximas semanas.
Fuente: IMDb